domingo, 11 de septiembre de 2011

¿QUÉ ES LA LIBERTAD?

…¿El ser humano por naturaleza es libre?, en realidad la palabra libertad es un término muy abstracto ya que se da a entender pero es realmente difícil de encontrar las palabras precisas para definirla, algunos filosos manifiestan lo siguiente:

Imanuel Kant
La liberta es la capacidad de los seres racionales para determinarse a obrar según leyes de otra índole que las naturales, esto es, según leyes que son dadas por su propia razón; liber­tad equivale a autonomía de la voluntad.
La razón teórica no puede demostrar la existencia de la libertad pues solo es capaz de alcanzar el mundo de los fenómenos, mundo en el que todo está sometido a la ley de causalidad, y por lo tanto en el que todo ocurre por necesidad natural. Sin embargo, desde la perspectiva de la razón práctica, y si queremos entender la experiencia moral, cabe la defensa de la existencia de la libertad: si en sus acciones las personas están determinadas por causas naturales, es decir si carecen de libertad, no podemos atribuirles responsabilidad, ni es posible la conducta moral; de este modo, la libertad es la ratio essendi (la condición de la posibilidad) de la moralidad, a la vez que la moralidad es la ratio cognoscendi (lo que nos muestra o da noticia) de la libertad.

El concepto de libertad.
Con carácter general, el concepto de libertad - especialmente a nivel personal - presupone la disposición de una posibilidad de elegir. Esa posibilidad de elegir presupone a su vez la de disponer de elementos de juicio que conduzcan a la elección; lo que requiere la posesión del conocimiento de los componentes de esos elementos de juicio, y de la inteligencia adecuada para valorarlos debidamente y discernir acerca de la conveniencia de la elección.
Al mismo tiempo, la libertad no es absoluta. El hombre no dispone de una posibilidad absoluta de elegir: no es posible elegir en contra de lo que disponen las leyes de la Naturaleza; ni es admisible ejercer una supuesta libertad en perjuicio de otros
Por lo tanto, la idea de libertad lleva implícito el concepto de sus límites. Su ejercicio requiere la posesión del conocimiento por una parte, y de la inteligencia por otra; que habilitan para determinar el ámbito de la libertad en el marco de los límites de índole material y moral que la circunscriben.

 

La libertad en la filosofía de Grecia clásica.
En términos filosóficos, la cuestión de la libertad encierra primeramente la de determinar si el hombre posee una libertad, y también la de definir en qué puede ella consistir.
Los griegos, en función del régimen imperante en su época, contrapusieron el concepto del hombre libre al de esclavo. Distinguían por una parte la condición de libre en el sentido político como aquella del que ingresaba en la polis como ciudadano libre; así como por otro lado la que podría traducirse por ¿liberalidad? o condición espiritual por la cual la capacidad de creación se encontraba plenamente activa.
En tal sentido, el hombre libre era el que no estaba sometido; de manera que poseía por un lado la plena capacidad de decidir que comprendía una autodeterminación respecto de sí mismo, pero también en los asuntos de la comunidad, lo que a su turno implicaba un concepto de responsabilidad hacia la comunidad en cuanto a ese ejercicio de su libertad. Por tanto, en este concepto, el hecho de ser libre significaba asimismo asumir obligaciones.

Platón – Aristóteles.
La concepción de la libertad estaba estrechamente ligada a la idea de la autonomía, es decir, la capacidad de decidir por sí mismo.
Pero, especialmente para Aristóteles, la cuestión de la libertad queda directamente referida al respeto, no solamente del orden natural, sino también del orden moral.
Para el Estagirita, todos los procesos de la Naturaleza operan en función de una finalidad que les es propia, tienden a sus propios fines. Pero en el hombre, si bien sus acciones siempre tienden a un mismo fin - consistente en la búsqueda de la felicidad - ellas están caracterizadas por un poder de ejercicio de la voluntad.
En el hombre, las acciones sólo son morales cuando están gobernadas por la voluntad frente a una posibilidad de haber elegido - el ¿libre albedrío?; pero esa posibilidad sólo puede existir cuando el hombre no está sujeto a la coacción de la ignorancia. Aristóteles consideró que el ejercicio de la libertad es esencialmente una obra de la razón; así como que toda vez que el hombre llega a conocer el bien solamente puede actuar de acuerdo con él. La actuación del hombre es libre, cuando su finalidad racional conduce a la realización del bien.

Pablo Pérez Sánchez
La libertad de la persona sobre sí alcanza ciertos aspectos de su ser, un cierto horizonte de su actuación, pero está determinada en lo que su ser ha sido previamente configurado, constituyéndose su naturaleza. Naturaleza que es mixta de cuerpo y alma.  
El hombre puede decidir sus pasos, pero no las consecuencias; puede escoger la dirección, pero no la meta de su vida. Los resultados de su actividad en el mundo están determinados por la naturaleza de las cosas, tanto en lo ajeno como en lo propio.

A mi criterio, para poder sentir libertad debe haber un equilibrio entre el cuerpo, la mente y el alma, solo así podemos decir que somos plenamente libres.

“Porque ser libre no es solamente desamarrarse las propias cadenas, sino vivir en una forma que respete y mejore la libertad de los demás”.
 (Nelson Mandela).

sábado, 10 de septiembre de 2011

QUE DEBEMOS TENER EN CUENTA AL MOMENTO DE ELEGIR A LOS COLABORADORES.


Trabaja duro por ofrecer un servicio de excelencia tiene gran parte del camino ganado. Y no sólo eso, su crecimiento será natural.
La clave es recordar que no se trata sólo de atraerlos, sino de mantenerlos. El arma secreta: tus empleados y su capacidad para tomar decisiones acertadas.
El reto, entonces, es elegir a quienes tendrán la tarea de ganarse a todo aquel que entre en tu empresa. La mala noticia es que reclutar personal no es una labor fácil, ya que requieres de un plan de acción puntual y profesional que facilite tu búsqueda.
El primer paso para contratar colaboradores con enfoque en los clientes consiste en definir las competencias o habilidades necesarias para cada uno de los puestos del negocio?
Al no contar con un departamento de recursos humanos lo más recomendable es que te acerques a un reclutador profesional, quien te ayudará a establecer la técnica, así como su desarrollo e implementación. Para lograrlo es necesario tener clara la visión y misión de tu negocio, pues te servirán de base para identificar las características del personal a contratar.
No olvides que cuando tienes una definición adecuada de cada una de las características que demandas y de su significado en el negocio, resulta más sencillo detectarlas desde el primer encuentro. Si tú serás quien entreviste a los candidatos, diseña una serie de descriptores que te funcionarán como herramientas para la selección.

…LA IMPORTANCIA DE UNA BUENA ESCUCHA.

Una investigación se reafirmaron antiguas sospechas: los líderes están tan confiados en sus capacidades, que no toman consejos de otros.
 
Keith Davis, profesor de Management en Escuela de negocios de la Universidad estatal de Arizona quien conocía con anterioridad esta carencia, se dio el trabajo de realizar una lista con 10 consejos para las personas que están en puestos de alto rango y escuchan poco a los demás para tomar sus decisiones. Éstos son:
1. "Deja de hablar: no puedes escuchar si estás hablando".
2. "Haz que quien habla se sienta cómodo. Ayúdalo a sentir que puede hablar libremente".
3. "Demuestra que deseas escucharlo, que tu postura y expresión denoten el interés que sientes".
4. "Elimina y evita distracciones. No respondas el teléfono ni hagas caso de ninguna cosa externa que pueda distraerte".
5. "Trata de ser empático con el otro, establece un lazo afectivo desde el primer momento de la entrevista".
6. "Sé paciente y dale tiempo para explicarse, no interrumpas el relato".
7. "Mantén la calma y el buen humor, que no se observen señales de enojo o de impaciencia en tu rostro".
8. "Evita discusiones y críticas, sé prudente en tus argumentos y que tus decisiones sean racionales".
9. "Haz preguntas, éstas estimulan a tu interlocutor y demuestran tu interés por conocer la totalidad de la exposición".
10. "Para de hablar, es lo primero y lo último. Mientras hablas no llegan nuevos conceptos. Además frena la explicación de tu interlocutor".
Fuente: Alto Nivel